La Concejalía de Promoción y
Desarrollo ha celebrado un año más, y ya van tres, lo que extravagantemente
denominan como Feria de Empleo. Una recogida masiva de currículums, por parte
de algunas de las empresas de nuestra ciudad, con la finalidad de no se sabe
muy bien qué, porque si a alguien se le puede pasar por la mente que esto sirva
para generar empleo está muy lejos de la realidad. La jornada, que se ha
celebrado a pesar de los votos en contra de la mayoría de concejales en la Comisión de Promoción y Desarrollo (la legislatura del consenso
dicen que iba a ser…) ha sido calificada como “todo un éxito de público”. Es
indignante ver como las personas desempleadas o las que quieren cambiar de
trabajo en Aranda de Duero son utilizadas como público, y es indignante medir
el éxito de la jornada por el número de visitantes a la misma. Demostrado
queda, no obstante, el enorme problema de desempleo que tenemos en Aranda y,
junto a ello, la cantidad de gente que queriendo trabajar no pueden hacerlo.
(Imagen del Norte de Castilla) |
Además, es que esta jornada ha
coincidido en tiempo con el peor dato de aumento del desempleo en la oficina de
empleo de Aranda desde que se tienen datos registrados. 756 parados más durante
el mes de octubre que dejan en evidencia el grave problema estructural del
mercado de trabajo en nuestra comarca, que tan sólo se mueve, y de qué manera,
con tareas estacionales como la vendimia y otras tareas del campo o con los
vaivenes puntuales del sector servicios ligados a la hostelería y al turismo.
Es decir, que Aranda y la comarca están absolutamente estancadas, que o hacemos
algo o Aranda se muere. Y es aquí donde queda demostrada la inacción más
rotunda del equipo de gobierno para con este problema, nuestro principal
problema.
Aranda y la comarca no necesitan
una feria de empleo o de desempleo como la que se ha celebrado. Aranda y la
comarca necesitan un proyecto concreto y serio de la Concejalía de Promoción y
Desarrollo. Aranda y la comarca necesitan una apuesta decidida por la
reindustrialización, por sustentar nuestra base económica sobre una industria
fuerte y consolidada, que ayude a crear en torno a ella actividades y servicios
que conformen una Aranda en continuo desarrollo. Aranda y la comarca necesitan
una política industrial activa, seria y coherente que se apoye en la
innovación, impulse la inversión en infraestructuras, se comprometa con las
empresas ya instaladas, y se esfuerce por conseguir la llegada de otras nuevas.
Y quien tiene que liderar este
proyecto es el equipo de gobierno de nuestra Corporación. Que se dejen de
ferias sin sentido, fotos o charlas mediáticas, y pongan a disposición de ello
todos los recursos posibles y necesarios. Y es urgente que escuchen. Que
escuchen a todos los agentes políticos, sociales y económicos para evitar que
nuestra ciudad y nuestra comarca se estanquen para siempre.
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